Imaginarios
como plantas carnívoras en mi sofá
tercios a bayoneta
entrando en mi cerebro.
Guerra sin paz ni treguas
mundos que se revuelven en sus tripas
disparos de margaritas
sangre de chocolate espeso.
Milímetros
de ignorancia destructiva
de una mira láser
de robots suplicando.
Mirada aterrorizada
de una suegra mutante
de hachazos con derechos reservados
la guerra de los mundos habla.
Se quebró la rama de olivo
de la paz mutilada por el tiempo,
donde sólo uno decide
quien o no en esta ecuación muere.
Aquella que por inmadurez se quedó
estancada en una época inexistente,
aunque se repita que no hace daño
los demás pagaran por ello.
Sin ser positiva con sus hechos
deja que te llegue el agua al cuello,
el egoísmo es un viejo pecado
que lamentablemente nos callamos.
Y grita orgullosa que no volverá atrás
aunque tenga que romper todas las ramas,
su inspiración es una guerra
que se traga todo a su alrededor.
Lucha
de manada de teclas
sobre un manto eyaculado
de plancton de tinta.
Guerra
de mujeres y hombres
guerreros de boletín
ofertas y gangas.
Pelea
de perlas y joyas
de consentidos y vagos
de pedorretas.
Abusos
de palabras pervertidas
que antes eran algo
y ahora ya no son nada.
Democracia
en un tablero de ajedrez
donde los peones
desprestigian el cuerpo a cuerpo.
Estoy hechizado
por mis últimos sueños
de unas guerras no batalladas
pero me invaden.
No recuerdo combatirlas
pero cada noche vienen a mi
y no tengo la culpa
pero no me dejan llegar al final.
Quisiera saber si son recuerdos
de vidas pasadas, otras batallas
o son premoniciones del futuro
y están por pasar.
Ya son varios días
luchando en las trincheras
y me despierto herido y cansado
pero quiero volver a soñar…
Reve Cossue 
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