Una estrella llamada Ana

Que dulce es tu mirada

mi querida Ana

a pesar de los planetas

que nos separan.

Que bonito es tu verbo

cuando describes galaxias

esas que vas encontrado

buscándome a mi.

Que cálido es el regreso

a tu sistema solar preferido

allí donde el sol

habla de nuestro pasado.

Que fuente de la vida

te otorgó la juventud divina

esa que te hace proseguir

incluso cuando duermes.