Hoy soñé que era un chico guapo, listo y que no pasa inadvertido, lleno de éxito y cautivador para las mujeres. El típico sueño que una vez en la vida han tenido todos o la gran mayoría y quien lo niegue miente. Luego obviamente desperté como si reviviera de entre los muertos y me apresuré a ir al espejo, por supuesto, nada había cambiado.
Por un momento me permití tener un sentimiento de tristeza pero luego me acordé de todas aquellas cosas que conseguí siendo yo mismo a lo largo de mi vida y una gran sonrisa se dibujo en mi rostro. De acuerdo que ahora llevo una vida más sedentaria y apagada por motivos de salud, ya no soy ese mochilero loco que aprovechaba todo su tiempo libre en lanzarse a la aventura pero ahora lo poco que mi cuerpo me deja hacer intento exprimirlo lo máximo que puedo.
Sé que jamás seré lo que mi sueño creó pero nunca he sentido rechazo, siempre he sido una persona respetuosa y cariñosa con todo ser vivo que se cruza en mi camino, de ahí mi eterna sonrisa, así que no intenten hacer de los sueños realidades, crean en si mismos sin importar posiciones o estados, a todos nos irá mejor.
Posdata: no estoy en contra de los sueños pero algunos mejor dejarlos en la nevera.