Deseos. . .

El agua, cálida.
Se deslizaba por tus pechos parándose en cada poro de tu piel hasta perderse en el infinito.
Momento de perpetua mirada, de fascinación por tu belleza.
Tu personalidad propia, tu humana comprensión hacia mi.
Revolotean las partículas de tu vida a mi alrededor.
Deseos.