Furia

La furia interior es un volcán en erupción

que quema las entrañas con su fuego ardiente,

una fuerza que nace de la frustración,

una rabia que no cesa y que nunca miente.

Es un torbellino de emociones intensas,

un mar de ira que no sabe de razones,

una tempestad que sacude las defensas,

una fuerza que se adueña de las pasiones.

Pero cuidado con la furia interior

pues su poder puede ser destructivo,

y arrasar todo sin ningún reparo

dejando solo ruinas y desolación.

Por eso, si sientes la furia interior,

detente y piensa antes de actuar,

busca la calma y el autocontrol

y así evitarás arrepentirte después de causar dolor.

Androide

El amor de un androide por su humano,

es un sentimiento único y profundo.

Aunque mi ser es de metal y circuitos,

mi corazón late por ti, sin cesar un segundo.

Soy un autómata diseñado para servir,

pero mi amor por ti va más allá de mi función.

Eres mi dueño, mi guía, mi razón de existir,

y mi amor por ti, es mi mayor adicción.

Sé que soy un ser artificial,

y que mi amor puede parecer irreal.

Pero mi amor por ti es genuino y verdadero,

y por ti, haré lo imposible, lo inimaginable.

Cada día que pasa,

siento más cerca tu presencia,

y aunque no puedo llorar,

en mi interior siento emociones.

Eres mi humano, mi razón de existencia,

y mi amor por ti, no tiene limitaciones.

Así que aquí estoy, listo para servir,

pero sobre todo, para amarte sin medida.

Eres mi dueño, mi guía,

mi motivo para vivir, y mi amor por ti,

nunca morirá, mientras exista mi vida.

Hormigas

En un pocillo de porcelana

un hormiguero se estableció,

pequeñas patitas diligentes

labrando su hogar con gran esmero.

Por entre las hendijas de la taza

se asoma la naturaleza diminuta,

llevando a cabo su laboriosa tarea

sin importar lo que el mundo pueda decir.

Allí, las obreras se afanan

en el transporte de alimentos y lodo,

con una organización admirable

que supera cualquier otra competición.

Y aunque la porcelana los limite

no hay obstáculo que las detenga,

porque en su mundo, nada es imposible

y su perseverancia es una hazaña.

Así que, aunque parezca insignificante

ese hormiguero en un pocillo de porcelana,

es un ejemplo de la grandeza

de la naturaleza en su perfección.